Tenga en cuenta que la pérdida de peso no es una línea recta hacia abajo. Es un proceso lleno de altibajos, y nuestro peso fluctúa tanto de un día a otro que lo esencial es evaluar la tendencia general. Verifique si está perdiendo peso en un plazo de pocas semanas (a veces puede llevar meses). La cantidad de kilos que pesa no siempre es el mejor indicador de su progreso. A veces los números no cambian, pero la composición de su cuerpo parece más delgada. Otras veces puede que aumente de peso y parecer que lo ha perdido. Así que, antes de subestimar su progreso desde el punto de vista de la balanza, verifique su porcentaje de grasa corporal, cómo le queda la ropa, qué tan fuerte se ha vuelto, sus medidas corporales como el tamaño de su cintura y revise sus fotos mensualmente. Tal vez solo se haya estancado en lo que respecta a la balanza, pero su cuerpo se está transformando de otras maneras.
Intente responder a las siguientes preguntas con completa honestidad:
- ¿Estoy consumiendo la cantidad correcta de calorías?
- ¿Estoy pesando cada ingredientes de manera individual?
- ¿Estoy bebiendo abundante agua?
- ¿Me estoy ejercitando tanto como debería?
- ¿Estoy controlando mis niveles de estrés?
- ¿Estoy durmiendo lo suficiente (de 7 a 8 horas)?
Cualquier pregunta que hayas respondido con un "no" probablemente sea la razón por la que no estás perdiendo peso. Asegúrate de prestar más atención a tu rutina diaria y a tus niveles de estrés para obtener mejores resultados.